Cómo
ADMINISTRAR UNA IGLESIA
“Así pues téngannos los hombres por servidores de Cristo y
administradores de los ministerios de Dios”.
1ª Cor.4:1-2
Introducción
En una encuesta realizada a pastores de
varias denominaciones, preferentemente pentecostales, se le preguntó a los
participantes si la iglesia es una empresa administrable: El 60% contestó que
es posible administrarla y el 40% contestó... que la iglesia no puede funcionar
como una empresa. Al preguntarles por una razón estos 40% respondieron: “Si nos adelantamos a los hechos y
programamos todas las actividades de la casa del Señor, no le dejamos actuar al
Espíritu Santo, no le dejamos a Dios ser Dios”.
Al 60% que ha contestado positivamente le hemos formulado otra pregunta: Si la
iglesia en una empresa administrable ¿Usted maneja su iglesia sobre la base de
presupuestos? La respuesta de la mayoría fue que no, pero que sería bueno e
ideal manejarse así. Estos datos nos indican la realidad de la iglesia
latinoamericana. Existe el grupo que cree que no es necesario el uso de las
herramientas administrativas, y existe el otro grupo que cree que su uso podría
ser beneficioso pero no existen los conocimientos para ponerlo en práctica.
Los pastores son administradores que organizan, trazan, guían y dirigen los
asuntos de la iglesia. El apóstol Pablo declara en 1ª Corintios 12:28 que la
administración es un don espiritual: “En la iglesia Dios ha puesto, en primer
lugar, apóstoles; en segundo lugar, profetas; en tercer lugar, maestros; luego
los que hacen milagros; después los que tienen dones para sanar enfermos, los
que ayudan a otros, los que administran...”. La respuesta al ¿Cómo Administrar una Iglesia? está
contenida en los aspectos que veremos más adelante.
El pastor es un visionario, lo que
significa que él, ve a dónde la iglesia debe dirigirse y toma ciertos pasos
para ayudar a la iglesia a llegar a donde se está dirigiendo. Sin una visión,
sin una filosofía de ministerio, sin una comprensión de los programas y las
actividades, la iglesia se mueve sin un sentido de dirección. Para que el
pastor pueda administrar la iglesia, necesita presentarle una visión, y ésta
necesita ponerse por escrito.
I.- Conceptualización
A.- Concepto de Iglesia
Hay dos palabras usadas en el Nuevo Testamento
para referirse a una congregación: sunagogué y ekklesía. El término sunagogué
que significa reunir a una asamblea, se usaba también para designar el lugar
donde se congregaban los judíos: sinagoga.
La palabra ekklesía es un nombre verbal, el
verbo ekkaleo que da la idea de un grupo sacado o llamado. En Mateo 16:18:
“Sobre esta roca edificaré (oikodomeso) mi iglesia (ekklesía)”. El adjetivo
posesivo “Mi” al lado del nombre iglesia hace de Cristo el fundador y dueño de
la iglesia.
B.-
Concepto de Administración
En sentido básico es un proceso muy particular
consistente en las actividades de planeación, organización, ejecución y
control, desempeñadas para determinar y alcanzar los objetivos señalados con el
uso de seres humanos y otros recursos.
Según Henry Fayol (considerado como el verdadero
padre de la moderna Administración), dice que “administrar es prever,
organizar, mandar, coordinar y controlar”.
El Dr. George R. Terry la define como: “La
administración consiste en lograr que se hagan las cosas mediante otras
personas”.
Para J. D. Mooney: “Es el arte o técnica de
dirigir e inspirar a los demás, con base en un profundo y claro conocimiento de
la naturaleza humana”. Y contrapone esta definición con la que da sobre la
organización como: “la técnica de relacionar los deberes o funciones
específicas en un todo coordinado”.
Desde mi punto de vista la Administración es “Es
el proceso de lograr que las cosas se realicen por medio de la planeación,
organización, delegación de funciones, integración de personal, dirección y
control de otras personas, creando y manteniendo un ambiente en el cual la
persona se pueda desempeñar entusiastamente en conjunto con otras, sacando a
relucir su potencial, eficacia y eficiencia y lograr así fines determinados”.
II.- ¿Por qué es necesaria la
Administración?
La administración es necesaria para traer
eficiencia, orden y organización al trabajo de la iglesia para que todos los
recursos—incluyendo recursos humanos—sean usados efectivamente para alcanzar
logros significativos en el reino.
Un “Manual de
Administración Eclesial” es una guía práctica que no puede faltar en la
biblioteca privada de ningún Pastor, ya que no solamente enfoca los aspectos
teológicos prácticos, sino también ofrece las herramientas prácticas, legales y
contables. Estos son algunos de los temas que contienen los manuales: a)
Administración de la iglesia Cristiana. Nociones generales y fundamentación
bíblica. b) Presupuestos. c) Estableciendo metas y objetivos en la
administración. d) Procesos administrativos. e) Inventario. f) Aspectos
jurídicos y contables. g) Aspectos laborales h) Seguro social. i) Organigramas,
planillas y formularios.
III.- Una
mirada al ambiente secular del Ministerio
• La sociedad contemporánea es básicamente secular.
• La tecnología está avanzando a un ritmo que confunde casi a todos,
incluyendo a la mayoría de ministros.
• La resistencia al cambio no es tolerado en ninguna parte excepto en la
iglesia. Tal vez esa es la razón que lo notamos tanto.
• Eventos, circunstancias, y reacciones no son siempre como aparentan
ser.
• La gente sabe más, discierne y es más altamente motivada que lo que
aparenta ser.
• Las poblaciones están cambiando.
IV.- Mitos
con respecto a la Administración
• Dios
requiere fidelidad no efectividad.
• Las instituciones
son más importantes que la gente.
• Los
números no son importantes lo que importa es la santidad.
• La
administración no es bíblica.
V.- Realidades
Administrativas en la Iglesia Local
1.
Necesidad—El ministerio no se puede hacer, sin una buena estructura
organizacional, planeamiento, y supervisión administrativa.
2. Demanda
del tiempo—Algunos piensan que se requiere hasta el 40% del tiempo de ministro
para una administración efectiva.
3.
Cantidad de trabajo—El presente incremento de la demanda administrativa en la
iglesia local es debido a: (a) alta expectación de parte de los miembros, (b)
alta expectación de parte de la denominación, (c) alta expectación de parte de
la comunidad, (d) preferencia de los pastores, y/o (e) el incremento de la capacidad
de la edad informativa.
4. La
actitud pastoral hacia las áreas administrativas a menudo determina la
efectividad y los resultados predecibles. A continuación hay varias actitudes
típicas:
• Resiste
cada tarea administrativa que causará quejas, delegación irresponsable, o
descuido de tareas necesarias.
• Delegar
todo a los líderes laicos para que el pastor se dedique a las cosas
espirituales.
• Convertirse
en un genio organizacional con un plan perfecto para cada tarea.
• Ver
la administración como el precio para un ministerio efectivo—es el precio
que uno debe pagar por el privilegio de ser pastor.
• La
actitud ideal es ver la administración como una manera de expandir y
extender el ministerio.
VI.- ¿Qué
es la iglesia de Cristo en el sentido administrativo?
La iglesia
es la agrupación de cristianos cuyo desarrollo doctrinal y práctico depende de
la Biblia y del Espíritu Santo a través de la participación y utilización de
todos los recursos humanos y materiales. La Biblia como fuente inagotable de
sabiduría abunda en información y ejemplos sobre la organización y el orden en
materia administrativa, en la creación Dios demuestra su habilidad
administrativa planeando, ejecutando, organizando y evaluando cada etapa
creativa realizada nada escapa a su control divino no le falta ni le sobra
nada.
Es el
resultado de una buena administración que tiene todo previsto, dispuesto a la
hora indicada. Un
estudio realizado por LifeWay Research establece las 10 razones principales,
sin considerar el cambio de domicilio, las cuales motivan a las personas a
cambiar de iglesia:
1.�
La iglesia no me estaba ayudando espiritualmente.
2.�
No estaba involucrado en ningún trabajo significativo.
3.�
Desacuerdo con las enseñanzas.
4.�
Me sentía fuera de lugar.
5.�
El pastor no era un buen Administrador.
6.�
Siempre están pidiendo dinero.
7.�
La iglesia no parecía un lugar donde Dios estaba obrando.
8.�
La iglesia la manejaba un “grupito” desalentando a los otros.
9.�
El pastor juzgaba demasiado a las personas.
10.�
Desacuerdo con el manejo de los fondos.
VII.- La
iglesia está fundada sobre bases administrativas
El
administrador por excelencia Cristo; sentó las bases de una organización eficaz.
La técnica de la acción concentrada se ve en que, aunque el Señor predicó y llamó
a las multitudes, escogió un pequeño grupo de doce para comisionarles la
continuidad de la obra que él había iniciado. Pablo en la carta a los Corintios
enfatiza que el siervo de Dios debe ser un buen administrador “se requiere de
los administradores que cada uno sea hallado fiel” en este pasaje se establecen
tres hechos:
Primero,
que para ser administrador de los misterios de Dios es necesario ser un
servidor.
Segundo,
que los misterios de Dios es decir, la iglesia con todos sus factores divinos y
humanos es un cuerpo administrable.
Tercero,
que el requisito por excelencia para participar en la administración es la
fidelidad.
VIII.- La
Iglesia es una verdadera empresa administrable
Una
empresa, como la describe el profesor Reyes Ponce, está formada por tres
elementos: bienes materiales, o elemento pasivo; hombres, o elemento activo, y
sistemas o normas de conducta, disciplina y orientación. La iglesia está
integrada por estos tres tipos de elementos.
1- Bienes Materiales: para el desarrollo de
sus múltiples actividades la iglesia adquiere propiedades inmuebles, edificios,
mobiliario, equipos y materiales. El pueblo de Dios ha poseído siempre este
tipo de pertenencias se puede comprobar viendo al templo del Antiguo Testamento
como también a las posesiones de la iglesia primitiva.
2- Hombre: el elemento humano es la parte
vital de la iglesia y constituye el factor primario en la administración.
Aunque se dice que tratar con gente es la tarea más difícil; pero tratar con la
gente de Dios aplicando las técnicas de un verdadero líder cristiano resulta
una experiencia especial e inspiradora. Se descubren talentos, se preparan y se
les ocupa en la obra como una labor cumbre de un ministro.
3- Sistemas: la iglesia posee manuales,
constituciones, reglamentos, etc., pero la base de su gobierno y disciplina es
la Biblia.
IX.- Los tres tipos tradicionales
de gobierno eclesiástico
1- Gobierno Congregacional
Las iglesias bautistas, las iglesias
cristianas, las congregacionales y algunas independientes se rigen por este
tipo de gobierno. Strong, uno de los teólogos bautistas dice: cada iglesia
local está sujeta directamente a Cristo, no hay jurisdicción de una iglesia
sobre otra sino que todas están aun mismo nivel y son independientes unas de
otras.
Esta posición es citada por Ernest S. Williams
que fue superintendente de las Asambleas de Dios y agrega que las iglesias de
gobierno congregacional pueden creer en la cooperación entre iglesias pero que
ninguna iglesia, ni oficina fuera de si misma debe gobernar las iglesias
locales.
2- Gobierno Episcopal
En este
sistema, sobre salen ciertos oficiales, reconocidos como obispos, (de ahí el
nombre episcopal, de “Epískopos”) la autoridad de obispos y supervisores
distritales está fundada en la práctica de la iglesia primitiva, como se
registra en el Nuevo Testamento.
a) Las
iglesias locales fueron fundadas y supervisadas por apóstoles
b) Pablo
ejerció la superintendencia de las iglesias de Asia y Europa
c) El
sistema de ofrendas y la institución de acciones tanto disciplinarias como
ceremoniales son asuntos trascendentales determinados por el apóstol a nivel
regional. Muchas iglesias de reconocen
como autoridad máxima en asuntos administrativos a la Asamblea General.
3-
Gobierno Presbiterial
Este gobierno difiere con el gobierno
episcopal y también difiere, con los gobiernos democráticos. El tipo
presbiterial elige ancianos gobernantes, los cuales forman el consistorio para
el gobierno de la iglesia local. Para asuntos regionales, las iglesias
presbiterianas cuentan con presbiterios y sínodos que también son grupos
representativos de autoridad superior.
4.- Estilos
de gobierno Mixtos
En la mayoría de las iglesias pentecostales
suelen hacer una combinación de los estilos de gobierno antes mencionados y le
agregan algunas variantes según la visión de sus líderes, el lugar donde se
encuentren y la cantidad de miembros que
posean.
X.- Requerimientos
de la tarea Administrativa
Muy a menudo, los que no son cercanos a los
líderes de la iglesia se sorprenden por la variedad de detalles que un
administrador enfrenta con frecuencia. El liderazgo administrativo hace muchas
demandas en el pastor y al mismo tiempo le da a el o ella una oportunidad
increíble de moldear la iglesia.
1.- Moldeador de la misión y visión—El
pastor y/o los empleados de la iglesia local deberían saber más acerca de la
misión y responsabilidades de la iglesia que cualquier otra persona en la
congregación y deberían compartir su conocimiento persistentemente.
2.- Implementación—La implementación de
planes, programas y ministerios para cumplir con la misión. Las actas oficiales
de cada organización cristiana están llenas de decisiones que fueron aprobadas
pero que nunca se llevaron a cabo.
3.- Guardián del rebaño de Dios—La
realidad es que el pastor como encargado de la iglesia en última instancia
trabaja para Dios y no para la iglesia local. Vea 1 Timoteo 3:1 y Tito 1:7.
4.- Parte del equipo—Participación
significativa en reuniones denominacionales y de la comunidad; por lo tanto, el
pastor tiene algunas responsabilidades que se espera de los líderes laicos en
la congregación local.
5.- Liderazgo
Financiero—Esto involucra levantar fondos, presupuestar los fondos, inversión
de fondos, y hacer todo el esfuerzo necesario para demostrar integridad impecable
en todos los asuntos financieros.
6.- Tradiciones—No
todas las tradiciones son malas, tampoco todo lo que es nuevo es efectivo. En
tiempos rápidamente cambiantes, es necesario que el líder re-energice métodos
de ministerio establecidos y reinventar nuevos y efectivos.
7.- Mantenga y entrene lideres—Esto quiere
decir ayudar a cada creyente encontrar y desarrollar sus dones espirituales
para el uso en el servicio de Cristo, el pueblo de Dios, y la comunidad.
8.- Maneje el Conflicto—Casi cada paso
progresivo requiere cambio de parte de alguien, y ese cambio a menudo produce
conflicto. Por lo tanto, el pastor necesita desarrollar habilidades para ayudar
a la gente a resolver sus desacuerdos.
9.- Ventanas de Oportunidades—En cualquier
momento en la historia de una congregación, hay una ventana de oportunidad de
hacer algo magnificente para Dios—una oportunidad que se cerrara tan rápido
como se abra. Los buenos
Administradores cultivan la habilidad de ver
esas oportunidades y compartirlas con la congregación.
10.- Desarrollador de gente—Al mismo
tiempo que el pastor hace crecer la iglesia, el pastor también debe ayudar a
que la gente crezca. Como un padre, eso quiere decir, afirmando, motivando,
haciendo responsable, confortando, precaviendo y pastoreando.
Conclusión: 1 Pedro 4:10-11 (Nueva Versión Internacional)
10 Cada uno
ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando
fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas.11 El que habla, hágalo como quien expresa las palabras
mismas de Dios; el que presta algún servicio, hágalo como quien tiene el poder
de Dios. Así Dios será en todo alabado por medio de Jesucristo, a quien sea la
gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén.
Esperando que
esta enseñanza sea de utilidad, quedo a sus órdenes en Cristo Jesús.
Bendiciones y Shalom.¡